27 May Calcular 1 hora de e-learning
El elearning ya está con nosotros de manera generalizada. Prácticamente en todas las empresas se están impartiendo cursos on-line. Aún así, existen muchas dudas sobre muchos aspectos ya que es una disciplina nueva que ha irrumpido sin un plan formativo previo, es decir, las personas que lo tienen que manejar están aprendiendo «sobre la marcha». Hay poca formación sobre «Todo lo que tienes que saber para implantar el elearning en tu organización».
Uno de los apectos a tener en cuenta es la cuestión del tiempo. ¿Cuántas horas dura el curso? En este sentido hay varias preguntas que se suelen formular:
- ¿Cuánto contenido tiene una hora de elearning?
- ¿Qué implica un curso de 40 horas, o de 100 horas, o de x horas?
- ¿La duración hace referencia al tiempo de conexión del alumno a la plataforma?
- ¿Se tiene en cuenta el tiempo que necesita el alumno para hacer las tareas que se le pidan?
- ¿Cuenta dentro de la duración del curso el tiempo destinado a lecturas, participación en foros, etc.?
La duración del curso on-line es una de las características que siempre se especifica o se pide. Pero la variabilidad es enorme. Hay cursos de un determinado contenido que pueden ir desde 1 hora a 100 horas ¿qué justifica esa diferencia?
Nosotros hemos adoptado un sistema de valoración para decidir los contenidos y demás conceptos que tiene que llevar una hora de curso y en consecuencia, un curso de 10, 20, 40 horas o las que sean.
Tenemos en cuenta las siguientes reglas.
Cualquier tiempo que el alumno dedique para la realización del curso, se contabiliza dentro de las horas del curso. Por ejemplo, leer el contenido de una pantalla, realizar un ejercicio, ver un vídeo, leer un artículo dentro o fuera de la plataforma, participar en un foro, realizar una tarea o un trabajo, etc., todo lleva una dedicación que sumará en el cómputo global.
Evidentemente, hay que tener en cuenta que cada alumno tiene un ritmo de aprendizaje, un ritmo de ejecución, de lectura y de comprensión. Lo que significa que una persona tardará 10 minutos en leer un artículo y otra 20 minutos. Otra persona le dedicará otros 10 minutos más a volver a leerlo.
Por tanto, lo que hacemos es hacer una estimación del tiempo que tendría que dedicarse con un grado de atención efectivo. Significa que no estimamos cuánto se tarda en leer un texto, sino cuánto se tarda en abordar un texto de manera tal que el alumno pueda responder a un cuestionario o ejercicio en el que se evalúe la compresión del texto. Este aspecto modifica los tiempos ya que no es lo mismo hacer una lectura rápida que una lectura en la que comprendas los diferentes términos y además seas capaz de retener ciertos datos o conceptos, al menos a nivel de reconocimiento dentro de una prueba de evaluación.
Normalmente, a la hora de crear un curso partimos de los contenidos que están presentados en formato de documento de texto o en varios. Alguien anteriormente ha recogido el conocimiento en formato de documento o bien la primera tarea es hacerlo.
A continuación hay que montar el guión que va a preparar la digitalización posterior. El guión se suele presentar directamente en un formato similiar a como se verá una vez digitalizado. Por ejemplo, se presenta un PPT en el que cada slide es una pantalla.
¿Cómo hacer la conversión?
A continuación muestro un ejemplo de cómo armar una hora.
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